domingo, 29 de agosto de 2010

El adverbio de tiempo y de modo “siempre”.

La Esquina del Idioma
Piedad Villavicencio Bellolio

Consulta: ¿Es correcta la frase “Carlos siempre se va?” (Grace Martínez)

Respuesta: La voz “siempre” es adverbio de tiempo, se emplea con el significado de ‘invariablemente, habitualmente, eternamente, en cualquier tiempo’: Carlos siempre se va a la universidad después del desayuno. Carlos siempre está dispuesto a colaborar.

También se aplica como equivalente de ‘en todo caso, por lo menos, cuando menos’: No te desanimes, Carlos, que aunque no te renovaron el contrato de trabajo, siempre te quedará la satisfacción de haber aprendido algo nuevo.

Según el Diccionario de la Real Academia Española (DRAE), es adverbio de modo y se usa en Colombia como sinónimo de ‘decididamente, definitivamente’; el diccionario académico no menciona que este uso es coloquial. He notado que en la región Costa del Ecuador, específicamente en Guayaquil, también se utiliza con esta última acepción, en frases como: ¿Carlos siempre se va?, ¿Siempre te matriculaste en las clases de piano?, ¿Carlos y María siempre terminaron?
Tiene matices muy expresivos cuando se emplea en algunas locuciones adverbiales: Te recordaré por siempre (No te olvidaré nunca).

Usos y significados de los homófonos balón y valón; balsar y valsar.

Se escribe “balón”, con “b”, cuando se usa con el significado de pelota grande, ese objeto de entretenimiento que contiene aire a presión y se emplea en algunos deportes como el fútbol. También hay balones medicinales, estos son pesados y sirven para fortalecer o rehabilitar los músculos.
“Valón”, con “v”, es adjetivo y sustantivo. Es el gentilicio de los naturales de Valonia, región que ocupa el sur de Bélgica. El valón (dialecto del francés antiguo) es el idioma que se habla en esos territorios.

En el DRAE consta que en Colombia, Ecuador y Venezuela “valona” es sustantivo femenino que se emplea para referirse a las ‘crines (cerdas) convenientemente recortadas que cubren el cuello de las caballerías (caballos)’: El jinete acaricia la valona de su caballo.

La letra “w” o “v” doble también se conoce como “u valona”.

Balsar o balzar es un terreno que está cubierto o invadido de zarzas y maleza. Por favor, no relacione ese sustantivo con el verbo balsear (pasar, cruzar, recorrer un río en una balsa). No nos olvidemos de que en Ecuador, Balzar (con “b” y con “z”) se denomina un cantón de la provincia del Guayas.

Valsar, con “v”, es verbo. Significa bailar el valse o vals, un baile originario de Alemania. La palabra “vals” se deriva del alemán walsen (girar). Las quinceañeras valsan con sus padres después de que las presentan en sociedad.

Fuente:
DRAE y Ortografía Práctica de Océano.

Dibujo de: Ami Plasse, tomada del blog Ami Underground

Texto tomado de: La Esquina del Idioma Diario eluniverso.com Guayaquil, Ecuador

viernes, 27 de agosto de 2010

Complemento Directo (II)

Gazapos y tropezones

Manuel Corrales Pascual

De la Academia de la Lengua


Decíamos que hay en español verbos que necesitan algo -una palabra, una breve añadidura- para completar la significación de la frase en que tales verbos aparecen. Pues bien, eso que tales verbos necesitan es lo que se denomina gramaticalmente complemento directo (otros lo llaman también "objeto directo").

Se llama complemento porque completa, perfecciona, concreta y aclara la significación del mensaje. Y se llama directo porque va directamente unido al verbo, sin necesidad de ninguna partícula (preposición, conjunción...) que haga de vínculo entre ambos.

Si decimos o escribimos "fulanito hizo maravillas", el verbo hizo completa su significación con el nombre maravillas que es su complemento directo. Si decimos o escribimos "el trabajador acabó la tarea", el verbo acabó completa su significación con el sintagma la tarea, que es su complemento directo. Y así ocurre con otros muchos verbos de nuestra lengua.

¿Cómo se llaman estos verbos? La gramática los denomina verbos transitivos. ¿Por qué se llaman transitivos? O, lo que es lo mismo: ¿Qué es un verbo transitivo? El DRAE nos dice que es "el que se construye con complemento directo". Y dice bien, solo que habría que aclarar un poco el concepto de complemento directo.

Ya hemos dicho que es una palabra, o una corta secuencia de palabras, que se une directamente -sin intermediarios, por así decir- al verbo de una oración gramatical.

¿Pero qué palabra o conjunto de palabras? Vamos a introducir en nuestra explicación un término lingüístico de amplio uso en la Lingüística y en la Gramática actuales: es el término sintagma, y específicamente el sintagma nominal.
Ambos conceptos trataremos de explicarlos en nuestra próxima entrega.

Dibujo de: Ami Plasse, tomada del blog Ami Underground

Texto tomado de: Gazapos y tropezones Diario hoy.com.ec Quito, Ecuador

miércoles, 25 de agosto de 2010

Complemento directo I

Gazapos y tropezones

Manuel Corrales Pascual

De la Academia de la Lengua


Varias mamás me cuentan apenadísimas que sus pequeños se hacen un lío con esto de los complementos gramaticales. Y ellas también: también se hacen un lío y no acaban de encontrar el método para aclararles a sus retoños cosas tan oscuras e intrincadas.

Antes de abordar el asunto tengo que repetir lo que tantas veces han leído en esta columna mis lectores: en la escuela y en el colegio no se trata de que los alumnos aprendan mucha gramática, sino de que adquieran la mayor y mejor competencia posible en el buen uso de la lengua materna.

Y esto no se consigue aprendiendo gramática, sino ejercitándose en la lectura, en la escritura y en la elocución (en el buen hablar, vaya). La gramática es un instrumento auxiliar, es un modo de dar cuenta y razón (de explicar) por qué esto se dice o se escribe así. No es, pues, la gramática un fin, sino un medio. Y esto, lamentablemente, lo olvidan con frecuencia los maestros.

Ahora, sí, tratemos de dar cuenta y razón de los famosos complementos, y comencemos con el llamado complemento directo. Hay en español verbos, como hacer, acarrear, acabar, arrastrar y otros muchos, que en la oración gramatical necesitan algo para completar y precisar el mensaje que esa oración gramatical nos quiere transmitir. Si oímos decir, o leemos: "Fulanito hizo", y no oímos más, enseguida preguntamos: "¿Qué hizo?". En un mensaje como este: "A causa de las grandes tormentas, el río acarreó ...", nos parece sentir que a esa frase le falta algo. ¿Qué es lo que acarreó el río? Lo mismo nos ocurre con estas secuencias: "El trabajador acabó", "El leñador arrastró". La pregunta es en todos estos casos parecida: ¿qué es lo que el trabajador acabó?, ¿qué es lo que el leñador arrastró?

Dibujo de: Ami Plasse, tomada del blog Ami Underground

Texto tomado de: Gazapos y tropezones Diario hoy.com.ec Quito, Ecuador

domingo, 22 de agosto de 2010

Me trataste como un desecho y eso me ha dejado deshecha.

La Esquina del Idioma
Piedad Villavicencio Bellolio

Consulta: ¿Cuál es la diferencia entre desecho y deshecho? (Marcia Fernández, Guayaquil)

Respuesta: El nombre “desecho” se deriva del verbo “desechar” (‘apartar, despreciar, repudiar, rechazar, descartar, botar’). Desecho es lo último que queda después de haber seleccionado lo mejor. La basura, los restos, lo que sobra de algo, lo que es digno de desprecio son desechos.

El adjetivo “deshecho o deshecha” proviene del participio irregular del verbo “deshacer” (‘desbaratar, destrozar, descomponer, enflaquecer, debilitar, afligirse mucho’). En el Diccionario de la Real Academia Española (DRAE) consta con el significado de ‘dicho de la lluvia, de una borrasca, de un temporal, etcétera: Impetuosos, fuertes, violentos’. Como segunda acepción se incluye ‘desaliñado’.
Según este diccionario es sinónimo del sustantivo “desecho” (sin h), pero únicamente cuando se emplea con el significado de ‘atajo o senda’.

En Ecuador se aplica con el sentido de ‘cansado, extenuado, agobiado, muy triste’: El trabajo de hoy fue arduo, he quedado deshecha. Está deshecho, aún no logra recuperarse de la infausta noticia.

Continuemos con las palabras homófonas o parónimas:

Bago y vago
El nombre masculino “bago” se usa en León (ciudad y provincia de España) con el significado de ‘pago’, este pago no es la primera persona del presente de indicativo del verbo pagar, sino un sustantivo que se utiliza para mencionar un pueblo pequeño, aldea o región: La palabra bago es infrecuente en nuestros pagos. Por mis pagos corre una brisa marina.

El adjetivo “vago” equivale a ‘impreciso, ligero, indolente, haragán, indeterminado, indefinido, indeciso, dudoso, confuso, perezoso, callejero’: No seas tan vago.

Balar y valar
“Balar” es dar ‘balidos’ (voz característica de algunos animales mamíferos). El DRAE también registra el verbo balar como coloquialismo poco usado con la acepción de ‘suspirar, desear con ansia’: Balan más por el vino que por el pan.

“Valar” es lo relacionado con un muro, cerca o vallado, termina en “-ar”, pero es adjetivo, no verbo.

Balido y valido
El carnero, el cordero, la oveja, la cabra y otros animales cuando tienen miedo, hambre o porque algo los inquieta emiten un sonido que se denomina balido.

El participio del verbo valer es “valido” (sin tilde). En la España del siglo XVII se empleaba como sustantivo para designar al hombre de confianza del rey o de una autoridad, es semejante a ‘primer ministro’: Los reyes piden consejo a sus validos. No se confunda con el adjetivo “válido” (con tilde), que significa ‘firme, aceptable, que es legal o tiene validez’: Un recurso válido.

Cuando las personas muy mayores pueden aún valerse por sí solas se dice que son válidos o válidas, en este caso es sustantivo: Hospicio para válidos.
Fuente: DRAE.

Pintura de: Karin Jurick, tomada del blog A Painting Today

Texto tomado de: La Esquina del Idioma Diario eluniverso.com Guayaquil, Ecuador

viernes, 20 de agosto de 2010

Garaje y otros gajes

Gazapos y tropezones

Manuel Corrales Pascual

De la Academia de la Lengua


¿Cómo debe escribirse: "garage" o "garaje"? Es cierto que lo vemos con mucha frecuencia escrito de la primera forma. ¿Pero es correcta esa forma? Pues en francés, sí. En español, no.

¿Por qué acabo de aludir a la lengua francesa? Pues porque la palabra es de origen francés, y en francés se escribe correctamente garage, y la segunda "g" se pronuncia en forma parecida a la "y" de los argentinos.

También en el Ecuador he oído a algunas personas pronunciar la palabra "a la francesa".
Pero lo correcto en español es escribir "garaje" (la primera "g", la segunda "j"), y pronunciar la primera como "oclusiva linguovelar sonora", que dicen los fonólogos; es decir, como la "g" suave delante de "a", "o", "u", y la segunda como "fricativa linguovelar sorda"; es decir, como en "jirafa", "caja", "lujo", etc.

La dificultad ortográfica viene —creo yo— de que tanto "g" como "j" se pronuncian de igual manera delante de "e" y de "i". Según la norma académica, se escriben con "j" las palabras acabadas en "aje", como drenaje, garaje, bricolaje.

Con algunas pocas excepciones, palabras muy cultas o muy técnicas, como hipálage, enálage, ambages o colage (esta última también de origen francés, admitida en 1992 por la Real Academia).
Entre los ejemplos he mencionado bricolaje. Pues bien, bricolaje es también de estirpe francesa. Palabra hispanizada excepto en la ortografía (igual que garaje).

¿Y qué es un garaje? Dos respuestas da el diccionario: "local destinado a guardar automóviles" y "taller de reparación de vehículos". ¿Y bricolaje? Es "actividad manual que se manifiesta en obras de carpintería, fontanería, electricidad, etc., realizadas en la propia vivienda sin acudir a profesionales".

Pintura de: Celeste Bergin, tomada del blog Celeste Bergin

Texto tomado de: Gazapos y tropezones Diario hoy.com.ec Quito, Ecuador

miércoles, 18 de agosto de 2010

Tilde en las mayúsculas

Gazapos y tropezones

Manuel Corrales Pascual

De la Academia de la Lengua


Frecuente pregunta es esta: ¿Se tildan las mayúsculas? A veces la consulta no es consulta sino grave aseveración: "¡Las mayúsculas no se tildan!" O, tal vez un poco menos fuerte, esta propuesta: "Es facultativo tildar las mayúsculas", es decir, que se las puede tildar o no, y quien no las tilde no comete falta de ortografía, puesto que es libre de tildarlas.

Aun cuando me parece que ya me ocupé en otra ocasión de este asunto, parece saludable volver sobre él: "Lo que abunda no hace daño", dice el dicho popular.

Pues bien, veamos qué es lo que al respecto dice la Ortografía académica, en el capítulo III, epígrafe 3.1.1., p. 31:
"El empleo de la mayúscula no exime de poner tilde cuando así lo exijan las reglas de acentuación (véase cap. IV). Ejemplos: Álvaro, SÁNCHEZ".
Dícese allí que "no exime", es decir, que no es uno libre de poner o no tilde en las mayúsculas.

Por consiguiente: hay que tildarlas.
Dícese también "cuando así lo exijan las reglas". Por consiguiente, se trata de una exigencia, de una obligación.

Hácese finalmente una referencia, al capítulo IV de la misma Ortografía. Vemos lo que dice al respecto este capítulo: "Las mayúsculas llevan tilde si les corresponde según las reglas dadas".
Nótese que dice "llevan", no dice "pueden llevar", expresión que indicaría el carácter potestativo de la norma. No: la norma es obligatoria.
Esto está en el epígrafe 4.10, p. 53 del texto académico. Añádese allí, al final del párrafo, esta importante observación: "La Academia nunca ha establecido una norma en contrario".

Tildemos, pues, SIEMPRE las mayúsculas, cuando, según las reglas de acentuación, haya que tildarlas. No tenemos escapatoria. Y no nos inventemos peregrinas excusas y subterfugios.

Pintura de: Margie Whittington, tomada del blog Margie Whittington Art

Texto tomado de: Gazapos y tropezones Diario hoy.com.ec Quito, Ecuador
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